Reseña

En un domingo de abril de 1945, Semprún, a los veintidós años, fue liberado del campo de concentración de Buchenwald por el III Ejército del general Patton. En otoño de aquel mismo año empezó a elaborar literariamente la monstruosa paradoja de haber vivido la muerte. Pero fue imposible."Entiéndase", dice él en su discurso con motivo del Premio de la Paz (1994), "no era imposible escribir: habría sido imposible sobrevivir a la escritura. (...) Tenía que elegir entre la escritura y la vida, y opté por la vida." La escritura o la vida es, pues, no sólo la memoria de la muerte, si no la de todas aquellas vivencias pasadas y presentes -vitales, sensoriales, afectivas, intelecturales y literarias- que, al revelarse, al abrirse sin restricciones a la conciencia del autor, emergen cargadas de la emoción del reencuentro consigo mismo y enriquecidas por la reflexión. Semprún habría podido contentarse con escribir un testimonio. Pero eligió el camino de la creación literaria.

  • Editorial:
  • ISBN [ISBN]