Reseña
Sus padres se conocieron en un campo de concentración en Auschwitz. Vivió en un conventillo. Su mamá lo abandonó y su papá lo dio a un asilo del que se escapó a los doce años. Nunca trabajó. Inventó el book de oro de la prostitución VIP. Ganó tres millones de dólares en el casino y le prohibieron la entrada de por vida. Estuvo preso durante la dictadura y fue torturado. Le ganó un juicio al Estado porque fue el único preso en la historia por promesa de casamiento. Le vendió la madre de su hija a un millonario en doce millones de dólares. Se enfrentó a Menem y a Duhalde. Vio llorar a Monzón por las infidelidades de Susana Giménez. Le comercializó servicios sexuales a grandes personajes internacionales, desde los presidentes Alan García y Sandro Pertini a estrellas como Rod Stewart y Gal Costa. Fue taxi boy de ancianas millonarias. Volteó jueces y comisarios con sus declaraciones en causas por drogas, estafas, pruebas falsas. Es la pesadilla de Franco Macri. Su testimonio definió el juicio por la muerte de Rodrigo. Lo quisieron matar, lo quisieron secuestrar. Tuvo que escaparse en un baúl de Chile por cuestionar a Pinochet. Se asume como el único proxeneta que tributó impuestos. Estuvo preso, vivió diez años en el Sheraton. Denuncia en qué gastan nuestros impuestos los políticos. Conoce los secretos de alcoba de los dirigentes más poderosos y los empresarios más reconocidos. Está en una cruzada contra los gatos del mundo de la moda y de la televisión. Es el mediático más célebre. Le da más importancias a las planillas de rating que a respirar. Defendió públicamente a Guillermo Cóppola en la causa del jarrón. Bancó a Marcelo Tinelli. Nunca tomó droga, nunca tomó champagne, nunca tomó whisky. Se ama y se odia con Diego Maradona. Le robó una novia a Reutemann y perdió una mujer con Gerardo Sofovich por poder y dinero. Hizo el amor con Silvia Süller en un balcón escuchando la marcha de San Lorenzo. Se dejó decir Chizito por 50.000 dólares pero asegura que está muy bien dotado. Algunas de sus frases ya son parte de lenguaje popular de los argentinos: "estas son pumas de bengala", "toman la leche en mamadera", "se sienta arriba del Pinocho", "este se la lassssstra", "algunos tienen noche y a otros se les hace tarde" o la incombustible "billetera mata galán". Jacobo es el anecdotario de un hombre que lo vivió y lo vio todo y tiene la valentía de contarlo con nombres propios, detalles y un estilo flamígero, impune y disparatado.
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